Si algo le faltaba a Lungro, epicentro del mate en Italia, era su propia yerba mate. Crecida en tierras apostoleñas, raíces de tierra colorada, ideada, soñada y empaquetada en Buenos Aires y con pasaporte italiano. La Sfogliatella entrevistó a Anna Stratigò, organizadora del festival “Mateando” e impulsora (quien sostiene y resguarda) de la cultura matera en Calabria y a Alejandro Trapine de Molinos Unidos, mano ejecutora de este proyecto.
Yerba y una pasión
Como ya hablamos largo y tendido, Lungro es un pueblo en Calabria que tiene una tradición desde hace décadas de tomar mate. Ellos cultivan sus propios porongos, tienen sus bomillas, la pava plateada en la que estás pensando y a veces le ponen un poco de azúcar. En otras oportunidades, Anna Stratigò contó a este medio ítalo-argentino, que el mate para ellos es: reunión, conversación, nostalgia, familia y compartir. ¿Te suena? se ve que el idioma del mate es el mismo en cualquier parte del mundo.
En esta oportunidad Anna dijo: “Esta yerba mate es producida en Argentina, lleva el nombre de nuestro pueblo. Es un regalo que nos hizo la Argentina, la empresa Molinos Unidos ha decidido hacer una tanda de yerba mate llamada Lungro, en homenaje a nuestra pasión. Es un gran resultado para mí, una satisfacción. Quien la beba sabrá que es nuestra. Y en abril estará a la venta“.
Anna Stratigò, emocionada recordó que: “He tenido pocas alegrías así de inmensas en la vida, que me han hecho llorar. En los últimos años hubieron dos sucesos en los que mi corazón se llenó de felicidad, que me hicieron saltar de la alegría. El primero es el encuentro con el Papa, donde compartí un mate con él. Y ahora cuando vi la yerba con el nombre ‘Lungro’, sólo puedo agradecerme a mí y a mis amigos que me apoyaron. Pero sobre todo porque escuché mi sensibilidad, a mis antepasados, la historia del mate en mi pueblo y me apoyé en esas personas que me estimulaban a continuar. Más que en los que me incitaban a dejar esta pasión”.
Un homenaje para Lungro
“Soy Alejandro Trapine, fundador de Molinos Unidos Argentina S.A., una empresa familiar argentina con más de siete años en la producción de yerba mate. Mi rol es liderar el desarrollo de productos innovadores que no solo representen nuestra tradición, sino que también expandan la cultura del mate al mundo”; así comenzó el diálogo el fundador de esta empresa, quien contó que conoció la historia de Lungro a partir de investigaciones que buscaban conocer más sobre la expansión del mate en Europa. Y confiesa haberse sorprendido (como muchos de nosotros) con la “fuerte identidad cultural”. Y añadió: “tiene una conexión histórica con el mate debido a la migración calabresa a Argentina. Este hallazgo nos inspiró a rendirle un homenaje especial“.
- Trapine aseguró que actualmente su vínculo con Lungro dejó de ser meramente investigativo para ser casi un lazo con la comunidad lungrese. “Hemos recibido mensajes y muestras de afecto, que valoran la iniciativa. Esto refuerza nuestro compromiso de estrechar aún más los lazos entre Lungro y Argentina”. Y ante la pregunta del millón ¿Cómo surgió este proyecto”, el fundador de Molinos Unidos comentó que: “Nació del deseo de destacar la historia de Lungro en el universo del mate. Como productores, sentimos la responsabilidad de difundir y honrar la cultura del mate más allá de Argentina. Así surgió la idea de crear una yerba mate exclusiva, diseñada como un reconocimiento a Lungro y su gente, reflejando los valores de unión, tradición y pasión compartidos entre ambas culturas”. Y ante la duda de los curiosos, desde La Sfogliatella les informamos que esta yerba mate está en la fase de producción y planificación para su lanzamiento. El objetivo es que esté disponible en Italia y en Argentina en los próximos meses.