Se relanza el Centro Emiliano-Romagnolo de Bahía Blanca

La gran familia de la Emilia Romagna sigue expandiéndose en Argentina. Puntualmente en Bahía Blanca, el Centro Emiliano Romagnolo (CERBB) retoma su actividad que inició formalmente hace 18 años. Y este 2 de julio, día de los emilianos romagnoles en el mundo, el Centro celebra su relanzamiento.

Nuevos comienzos

El relanzamiento será en el auditorio de la sede de la Asociación Dante Alighieri de Bahía Blanca, el 2 de julio a las 18 horas. Bruno Cimatti, uno de los miembros del grupo que lleva adelante la reactivación, indicó a La Sfogliatella: “Ese día se realizará un conversatorio sobre la región en general. Haciendo hincapié en el valor de su cultura, su gastronomía, su historia, su industria y sus bellezas naturales. Así como también sobre la importancia de las asociaciones de la Emilia Romagna en el mundo, el rol de la Consulta degli Emiliano-Romagnoli nel Mondo. Además de todas las oportunidades que el trabajo asociativo ofrece. Para terminar brindaremos con vino lambrusco, típico de la región”.

Junto a Diego Di Pasquale, llevan adelante esta tarea para el relanzamiento. Repasando la historia del CERBB, Cimatti dijo: “El Centro Emiliano-Romagnolo de Bahía Blanca se fundó oficialmente el 17 de abril de 2006. Aunque tuvo algunas actividades previas a su constitución como institución. Fue formado por inmigrantes y descendientes emiliano-romagnolos, con el fin de promover actividades ligadas tanto a la cultura de la región como a sus vínculos productivos con la zona de influencia de Bahía Blanca”. Sobre la misma línea, aclaró que: “En los últimos años, distintos motivos fueron llevando a la inactividad del Centro, que perdió miembros importantes y se disolvió de facto“.

La raíz sigue dando brotes

¿Por qué las hojas de la italianidad volvieron a brotar ahora? Cimatti aseguró que tiene que ver con un camino que propuso la Consulta de los Emilianos Romagnoles. En palabras de Bruno Cimatti: “Desde que empecé a participar en la Red de Jóvenes Italianos de Bahía Blanca, me puse a la búsqueda de una asociación Emilia Romagna para colaborar y participar de actividades. Como las personas a las que les pregunté me dijeron que estaba inactiva, tomé contacto con la Consulta, e inicié el percorso giovani. Eso me permitió conocer a jóvenes Emilia Romagna de otros lugares de América. Finalmente, encontrarme con ellos y los representantes de las distintas asociaciones de la región en la ciudad de San Pablo, en el pasado mes de abril”.

Y reforzando la idea de la importancia de los vínculos e iniciativas que se generan en esas reuniones dijo: “Lo vivido en esas jornadas hizo aumentar mis ganas de que en Bahía volviera a haber un centro. Además me permitió conocer el dato de Diego Di Pasquale, quien había formado parte del CERBB con anterioridad. Cuando volví, contacté a Diego y le transmití mis ganas de trabajar para reconstituir el Centro. Él es un artífice de este relanzamiento; es quien tiene el conocimiento de la experiencia previa, sabe cómo trabajar en el plano asociativo y tiene muchas ganas de hacerlo. Juntos estamos organizando la actividad de relanzamiento del centro. Esperamos atraer a nuevos miembros, además de sumar a aquellos antiguos participantes que quieran reeditar su experiencia”.

Emilia Romagna tiene historia en Bahía Blanca

Sobre las visiones que se tienen en este horizonte de esperanza que trae consigo un renacer, nuestro entrevistado comentó: “En el corto plazo, aspiramos a poder realizar la reconstitución formal del CERBB. Lo haremos mediante una asamblea constitutiva que nuclee a aquellas personas interesadas en participar, y que constituirán la nueva dirección del Centro. De allí en más, esperamos poder volver a posicionar al CERBB en el marco de las asociaciones italianas de Bahía Blanca. Será participando conjuntamente con ellas en ocasión de eventos como las Semanas de la Italianidad (junio), de la Lengua (octubre) y de la Cocina (noviembre). Además, buscamos realizar una agenda propia destinada a la vinculación cultural, académica, económica o de otra índole entre Bahía Blanca y la Emilia-Romagna”.

La inmigración de la región Emilia Romagna echó raíces y afectos en Bahía Blanca. Bruno Cimatti, también es Doctor en Historia y haciendo un exhaustivo rastreo de datos al respecto, comentó a La Sfogliatella que: “Es poco lo que se sabe de manera específica sobre la inmigración emiliano-romagnola en Bahía Blanca. Los datos más representativos que puedo ofrecer parten de mis propias investigaciones históricas y están basados en una muestra de aproximadamente un 10% de los italianos que residían en Bahía Blanca entre 1912 y 1922. Datos tomados del libro de socios de la Sociedad Italiana de Socorros Mutuos. En esos años, de los 1394 italianos registrados, los oriundos de la Emilia-Romagna eran 66 (8 mujeres y 51 varones), algo menos del 5%. A nivel profesional, los grupos más representados fueron los de empleados de comercio (16,67%), albañiles (13,64%), comerciantes (10,61%) y artesanos (10,61%)”. Como suele suceder en otros casos, ese 5% supo reunirse y mantener algo de lo que habían traído de su tierra. Y a juzgar por el relanzamiento de este espacio, la Emilia Romagna sigue latiendo en Bahía Blanca.

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